En este último temporal denominado Filomena ha salido a la luz un voluntariado diferente, grupos de propietarios de vehículos 4×4. No estamos hablando de ONG al uso, sino a grupos de amigos que deciden hacer algo en estas circunstancias: desde rescatar a conductores despistados, a trasladar personal sanitario y enfermos a centros de salud.
La mayoría de ellos solo disponen de un grupo en una red de mensajería instantánea y voluntad, más que suficiente para, en caso necesario, desplegarse con sus vehículos y echar un cable allí donde otros no llegan. Curioso que ONG subvencionadas y organismos oficiales no actúen y sin embargo estas personas no duden en intentar hacerlo con resultados normalmente satisfactorios.
Las ayudas no son siempre tan glamurosas e interesantes como han sido en esta ocasión. Hay voluntarios que acuden a dar batería a la máquina de fumigar del ayuntamiento, en otras ocasiones van a rescatar a otros vehículos 4×4, colaborar en catástrofes naturales o en búsquedas de personas desaparecidas.
El más famoso SOS4x4 se fundó en 2015 para ayudar a llegar al asfalto a otros usuarios a través de grupos de whatsapp, no para conversar o hacer amistades como hay otros, dicho sea de paso que también colaboran y se organizan en caso necesario, sino como grupo con el único objetivo de la colaboración altruista entre aficionados al off-road.
Los primeros mensajes eran del tipo Toyota atrapado en tal punto, con determinado número de ocupantes, sin necesidad de asistencia médica y una ubicación concreta. Entonces los voluntarios de la zona se organizan y se procede a la ayuda, la mayoría de veces con un simple «tirón», problema solucionado.
Son grupos sin personalidad jurídica, simplemente grupos de amigos que se organizan con dos simples normas:
– Si uno no puede, entre todos lo haremos.
– Entramos todos, salimos todos.
Debemos hacer un inciso y recordar que los usuarios de 4×4 estamos muy mal mirados, tildados de locos o prepotentes, poco menos que terroristas medioambientales que se dedican a destrozar montes y caminos, curioso cuando este tipo de voluntarios más de una vez y mas de dos recogen basura que desaprensivos arrojan en la naturaleza.
Muchos de ellos organizan limpiezas de montes y costas de manera habitual mientras que otras organizaciones «súper preocupadas» por el medio ambiente no hacen mas que poner el cazo y servir de servicios de empleo para el pago de deudas políticas.
Yo soy usuario de 4×4 y tengo el honor de colaborar en varios grupos de manera más o menos activa y no quiero que estas líneas se interpreten como una loa a una afición, sino que se vea como lo que realmente es, personas que ante la decisión de hacer algo o no hacerlo, deciden poner toda la carne en el asador.
En este caso gracias a estos voluntarios muchos conductores han salvado la vida, porque quitando la situación extrema, es un clásico en nuestra piel de toro que en cuanto caen cuatro copos de nieve se provoque un caos considerable y cientos de conductores se lancen a ver la nieve sin ningún tipo de
precaución y desoyendo los consejos de la DGT en materia de seguridad y que a continuación reitero:
EN CASO DE NEVADA
- LLEVAR CADENAS (por cierto estas se ponen cuando se ve la nieve en la carretera no cuando ya nos hemos quedado atrapados)
- LLEVAR EL DEPÓSITO LLENO (debemos ponernos en el caso extremo de quedarnos aislados en nuestro coche y necesitaremos tener el motor en marcha para mantener la calefacción)
- LLEVAR AGUA, UNA MANTA, UNA LINTERNA Y EL CARGADOR DEL MÓVIL
Con esto, que parecen nimiedades, podemos mantenernos calientes y esperar, poder continuar, o el rescate.
En nuestra piel de toro llegamos a límites esperpénticos como personas intentando rentabilizar una ayuda, es decir, estafar a personas en momentos de necesidad extrema. Recuerda, son grupos sin ánimo de lucro, nunca te pedirán dinero por ayudarte, aunque la invitación al almuerzo ninguno te la va a despreciar. Como casos que se dieron el fin de semana. Este operativo se ha saldado con catorce coches averiados y varios vandalizados, cosa que en ningún caso frenara el ímpetu y las ganas de esta suerte de caballeros modernos que no dudan en cooperar y ayudar poniéndose en riesgo ellos y sus vehículos.
